Otro año más empiezo la temporada de carreras apoyando la
competición por excelencia de Mtb, el XCO que cada vez está más olvidado frente
a las marchas convertidas en open de maratón. Este año se empieza en Cadalso de
los Vidrios, un circuito nuevo para mi pero que no defrauda. Muy divertido para
correr y para ver desde fuera, revirado, con mucho sendero, entretenidos pasos
técnicos y sobre todo una bajada y una subida especialmente exigentes. Mención especial merece el buen ambiente de la prueba, muchos niños participando y mucha afición. Así da gusto. Hay tiempo de
sobra para saludar a los compañeros de equipo y a los habituales (cada vez
conozco a menos gente y me conocen más a mi por la barba…) ya que la salida,
una vez más tiene pinta de retrasarse y así ocurre al final.
En la parrilla me llaman de los últimos y para no variar
hago una salida horrible, entro en la última posición al primer sendero y veo
como se escapan los primeros de la vista... pero no me cebo y voy remontando
poco a poco, pasando la zona revirada con pequeños sustos por culpa de algunas
piedras y raíces mojadas (escondidas y traicioneras). Adelanto incluso en la bajada
larga a varios corredores a pie y cuando llego a la subida me acerco
bastante al grupo pero es difícil adelantar por lo estrecho y
empinado del terreno y me veo frenado y aguantando rueda. Al terminar la
tercera vuelta estoy en el top 20 y con fuerzas, pero pese a ir con mucho
tiento y haber pasado la zona más difícil me salgo un poco de la trazada y
pillo un bache con la rueda trasera que me catapulta por los aires... por
suerte solo es chapa y pintura y consigo terminar, eso sí, perdiendo varios
minutos y sufriendo bastante dolor en el costado, pero esto es así.
Os dejo un
entretenido vídeo de un compañero Master 30 en el que aparezco en el
minuto 1:50 y podéis ver la salida y las zonas "calientes" del circuito.
Otro año más empiezo la temporada de carreras apoyando la
competición por excelencia de Mtb, el XCO que cada vez está más olvidado frente
a las marchas convertidas en open de maratón. Este año se empieza en Cadalso de
los Vidrios, un circuito nuevo para mi pero que no defrauda. Muy divertido para
correr y para ver desde fuera, revirado, con mucho sendero, entretenidos pasos
técnicos y sobre todo una bajada y una subida especialmente exigentes. Mención especial merece el buen ambiente de la prueba, muchos niños participando y mucha afición. Así da gusto. Hay tiempo de
sobra para saludar a los compañeros de equipo y a los habituales (cada vez
conozco a menos gente y me conocen más a mi por la barba…) ya que la salida,
una vez más tiene pinta de retrasarse y así ocurre al final.
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